Antiguamente la definición de hacer las Américas, era sinónimo de emigrar a América para intentar escapar de la pobreza existente en España e intentar prosperar en los países elegidos. La inmensa mayoría de los que emigraron, se quedaron en los países de destino y unos pocos tuvieron fortuna y con el capital conseguido decidieron regresar. A los que regresaban de esa forma se les llamaban indianos y si procedían de Perú, se le denominaban peruleros, igual que el nombre de mi firma.
Debido a las situaciones convulsas ocasionadas por los problemas políticos, sociales y económicos de estos países, la opción de hacer las Américas, decreció de forma considerable este proceso migratorio.
Pero esta definición de ganar dinero en América, se traslado a otros tipos de trabajadores, como son los cantantes y toreros, y todos los años hacen sus galas por estos países.
Ahora nuestro alcalde, Manuel Morilla, como apoderado de un torero, se va a hacer las Américas. Si Morón tuviera puerto, veríamos a la banda tocar con un poco de sorna, “Cuando un amigo se va” y a un buen número de asociaciones y habitantes de Morón, acompañando en la despedida, más que nada para comprobar que se va realmente y con la ilusión de que le vaya muy bien en América, con la esperanza de que no vuelva nunca más, aunque algunos sueñan que se hunda el barco y acabe en una isla perdida, y que tenga como compañero a un coco, de nombre Tate, al que le intente vender un trozo de isla con sus palmeras incluidas.
Las dudas que nos embarga es si va a poder compaginar su retiro espiritual en su cortijo, con la función de alcalde de baja laboral y con la función de apoderado de torero en América, y lo que más nos preocupa es si va a seguir cobrando como alcalde en baja laboral o como apoderado de un torero, pero conociendo el amor por Morón y sobre todo por su sueldo de alcalde, nadie duda de que sabrá compaginar sus nuevas actividades laborales.
Pero con su vuelta a los ruedos y sus posibles ausencias por su renovada actividad, lo recomendable es nombrar o elegir a un futuro candidato para las próximas elecciones, porque hasta que acabe la legislatura, el alcalde accidental puede seguir actuando como tal, que ya lleva ejerciendo más de un año y le ha cogido apego al cargo, pero el problema radica en que con su nueva actividad, por sus continuos desplazamientos y los diversos problemas legales pendientes de juicio o en proceso de investigación, urge buscar un candidato sólido.
Algunos candidatos están moviendo fichas para mejorar su posición, pero hay poco donde optar, debido a que de los actuales, la mayoría están descartados por su bajo nivel político y poco tirón electoral, otros descartados por sus posicionamientos defendiendo lo indefendible, también algunos han encontrado un retiro acorde a sus expectativas. Las opciones que quedan son pocas y puede saltar la sorpresa y salte a la palestra el nombre de un candidat@ que no figuraba en las primeras quinielas.
PERULERO
No hay comentarios:
Publicar un comentario